jueves, 23 de agosto de 2012

Un mundo nuevo en nuestros corazones

¡Hola!

Últimamente doy vueltas al hecho de que soy crítica con el mundo, pero no hago mucho para cambiarlo. Supongo que son fases que uno va atravesando mientras evoluciona... 

Hace unos meses me di cuenta de que no tenía ni idea de cómo funcionaba realmente el mundo a mi alrededor y al comenzar a informarme por "vías alternativas" comprendí que habría mucha gente en mi misma situación, de modo que surgió la idea de este blog, donde podría compartir (con quien lo quisiese leer) noticias o informaciones que me pareciesen sorprendentes, curiosas, didácticas o asquerosas. Un poco de todo.

Ahora siento que esto no es suficiente... a estas alturas creo que la mayoría de la gente es consciente de que la crisis es una estafa a gran escala, una excusa para imponernos cambios que establezcan un nuevo orden, de ricos cada vez más ricos, poderosos e intocables y pobres cada vez más pobres e indefensos.

Uno empieza a darle vueltas al hecho de que la especie humana le resulta cada vez más terrorífica. Mata por diversión, incluso a sus propios congéneres. Maltrata y abusa de quienes están más indefensos. Se ha apropiado del mundo, imponiendo su sistema de antivalores. Da la espalda a la naturaleza, a la Tierra, considerándola como un bien propio de su especie, algo que está a su disposición, en lugar de cuidarla como un hogar del que somos inquilinos temporales y en lugar de pensar en los que vendrán detrás. Parece que predomina el "el que venga detrás que se busque la vida, como yo me la busqué".

Bueno, en esto último he generalizado. Es verdad que hay muchos seres humanos despreciables que piensan así, pero quiero creer que son los menos. La mayoría de seres humanos son buenas personas, ensimismadas en su día a día y sus problemas, poco concienciadas con temas globales, quizás porque no disponen de la información suficiente, quizás porque se sienten incapaces de cambiar las cosas.

También hay muchos que piensan eso de que "a  mí no me ha ayudado nadie" y por eso son incapaces de mover un dedo ó más bien ya tienen una excusa para no hacerlo. Gran error, porque si no fuese porque a lo largo de la historia ha habido hombres y mujeres que han deseado hacer algo por los demás, ¿qué sería de nosotros? Así que quizás nadie haya venido y te haya dicho "eh, tú, vengo a ayudarte", pero no podemos negar que los grandes avances en medicina, en ciencia, las nuevas tecnologías, etc, han mejorado nuestra existencia. Y eso ha sido simplemente gracias a otros humanos que sí han elegido una forma de "ayudar" al resto, han imaginado un mundo distinto, mejor, y han trabajado para conseguirlo con mayor o menor éxito. Al menos lo han intentado. Pero desde luego, es mucho más cómodo vivir en nuestra burbuja e ir a lo nuestro que buscar algo en lo que mejorar otra vida, ayudar a algún ser vivo. Pese a que tengamos buenas intenciones, muchos pasamos la vida buscando excusas para justificarnos de por qué no hacemos lo que nos gustaría hacer. Por qué no ayudamos más a los demás. Por qué no perseguimos nuestros sueños. Por qué callamos o miramos para otro lado ante injusticias cotidianas. Por qué no somos más críticos activos, más participativos, más revolucionarios, si en el fondo queremos vivir en un mundo mejor.

En fin, que cada día tengo más claro que hay una frase absolutamente cierta. Más o menos viene a decir esto: el mundo no es peor por las acciones de los hombres malos, sino por el silencio ante estos de los hombres buenos. De la mayoría; una mayoría que mira para otro lado porque "bastante tienen con lo suyo".

Esta frase es la típica excusa, la que nos paraliza. No puedo creerme que alguien prefiera no aportar un granito de arena, aunque sea pequeño. Y es que cambiar el mundo puede sonarnos a algo grandioso, pero estoy convencida de que el mundo se cambiará con pequeños gestos, pequeños cambios de mentalidad en cada uno de nosotros, siendo un poco más empáticos, más conscientes, más críticos, más educados, más consecuentes.
Pongo un ejemplo. Cerca de mi casa hay un Mercadona y en la puerta todos los días hay un joven negro que vende "La Farola" y que siempre, siempre, te saluda con una sonrisa. La mayoría de las personas no le contestan, ni siquiera le miran. Y a mi me hierve la sangre. Joder, no te ha pedido nada. Es una persona. Que no vayas a comprarle el periódico no impide que le mires a la cara, le sonrías y le respondas. Es que parece que no es nada, pero ahora imagináos que sois él, que estáis varias horas al día saludando a gente que ni siquiera os responde, ni os mira. ¿Cómo os sentiríais?

Pues bien, este mundo parece estar lleno de buenas personas que están más preocupadas de que el aceite ha subido 30 céntimos (y no es mi intención quitarle importancia a este hecho) que de ser amable por unos segundos con otro ser humano. Esto ocasiona poco a poco un desapego entre humanos, un individualismo, un rencor, una frialdad, que hacen que la gente esté cada vez más dividida, más fría, más triste y sea más fácil de manejar y dividir.

Bueno, una vez os he soltado este rollo, me planteo lo siguiente. ¿Qué podemos hacer para cambiar el mundo? ¿Cómo pasamos de pasivos a activos? Y esto es algo que debemos hacer a todos los niveles posibles, en mi opinión. Creo que debemos cambiar nuestra mentalidad. Hasta ahora ha imperado el "por qué hacer algo, ¿¿si no vale de nada??" Ahora debe reinar el "cualquier pequeño gesto puede suponer un gran cambio".


Admiro a las personas decididas. Quizás hacen pequeñas cosas, quizás para muchos no sea una gran labor, pero oye, la mayoría les critica desde el sofá, y eso siempre es peor, ¿no?

Bueno, perdón por todo lo que he soltado aquí, pero llevo una temporadilla de dar vueltas a este tipo de cosas, pensando que necesito sentirme útil, y que tiene que haber una manera alternativa de vivir, de compartir, de consumir...

Bueno, que me estoy llendo por las ramas como siempre. El caso es que he empezado a conocer el trabajo de algunas protectoras de animales y he visto la tarea tan especial que hacen. Los pocos medios con los que cuentan. La impotencia de algunas situaciones que viven. La incomprensión de muchos por dedicarse a proteger "bichos" en vez de personas (como si no fuesemos los mayores "bichos", los mayores causantes de desgracias al resto de especies). Y a menudo, quien critica esto lo hace desde el sofá, desde donde no ayuda ni a bichos, ni a humanos ni a "ná". Porque quien es solidario no le pone barreras a este sentimiento. Y desea que mejoren las condiciones de todos los habitantes de la Tierra.

Bueno, el caso es que quisiera hablaros de dos que he conocido: en primer lugar una protectora situada en Madrid que ha creado un Santuario de animales ("El hogar de Luci"), donde recogen animales desauciados (por viejos, enfermos o porque son de especies que habitualmente no tiene la gente como mascotas). También funciona a modo de escuela, con el objetivo de concienciar a niños y mayores sobre la igualdad y el respeto entre especies.
Me ha parecido un proyecto valiente, precioso. Os dejo el enlace al blog del Santuario-Escuela y un pequeño vídeo donde podéis conocerles un poco mejor.



En segundo lugar he conocido una asociación en Asturias llamada Carácter Felino. Me ha impresionado mucho el trabajo que han realizado para rehabilitar una comunidad felina de más de 80 gatos, que vivían en un caserón a las afueras de Gijón con una mujer que tenía síndrome de Diógenes. El estado de la vivienda y de los gatos era lamentable, y aunque muchos han salido adelante y han sido adoptados, su salud se ha visto afectada en especial por problemas renales. Os invito a que fisgoteéis su web y conozcáis a estos gatitos (podéis ver vídeos muy bonitos), unos luchadores totales.

De entre todos los casos, me ha llegado al corazón el de Orión. Un gatito que justo ahora cumple un año y que es positivo en leucemia felina. Dicen que es un gato muy bueno y sociable con otros animales. Actualmente convive con una familia que le ha acogido de manera temporal, pero esta familia tiene un perro que la ha tomado con Orión y el pobre tiene que estar aislado y está estresado, por lo que esto puede perjudicar su salud. Llevan varios días haciendo una llamada desesperada para que alguien de un huequecito a Orión, aunque sea de forma temporal. La cosa se está torciendo de tal manera que incluso piden ya cualquier rincón, una habitación aunque sea. 

Este es Orión:




No he conseguido encontrar a alguien que desee darle una oportunidad a Orión. Sólo es un gato, solo tiene un año, no tiene la culpa de tener su enfermedad (que por otra parte, no le impide tener una vida normal). Quién le haga un hueco temporal, quien le acoja, no tendrá que pagar nada pues los gastos corren a cargo de la protectora. Lo ideal es que sea alguien sin gatos o cuyos gatos también sean positivos en leucemia felina. Con el resto de mascotas no habría problema.

Desearía poder acogerle yo misma, pero no puedo. Tengo un gato y no tengo posibilidad de tenerles separados.

Pero deseo con todas mis fuerzas aportar un granito de arena en este caso, ayudar a Orión a encontrar una familia que le adopte o le acoja, que le de una vida tranquila y llena de amor, como la que cualquiera de nosotros nos merecemos. Para muchos será un pequeño gesto, pero para Orión no es así, ¿no os parece?

Y quizás muchos piensen, "solo es un gato". Pero a mí no me importa. Hay muchas personas despreciables que tienen vidas cómodas, a pesar de que no las merezcan. Orión es un ser vivo, como los demás, y merece exactamente lo mismo. No por ser humanos somos mejores. Es más, deberíamos concienciarnos e intentar resarcir el daño que nuestra especie hace al resto, a todo su entorno. Siendo como somos la especie más dañina, no entiendo que haya gente que se considere superior al resto.

Bueno, ¿alguien se anima a darle una oportunidad a Orión y a ser un poquito más feliz y vivir mejor consigo mismo?

Gracias un día más

Saludos

No hay comentarios:

Publicar un comentario